SOLEÁ
Soleá, cante flamenco con coplas
de tres versos octosílabos en asonancia.
Se la conoce también con el nombre de "terceto gallego" o
"terceto celta".
Suele tratar sobre la soledad y el desengaño.
SOLEÁ DEL
AMOR GENEROSO
Todo es
cuestión de hidalguía:
tú me lo negaste todo
yo te di cuanto tenía. "
tú me lo negaste todo
yo te di cuanto tenía. "
Ni un
suspiro a mi cuidado
contestando a mi suspiro;
fuiste de duro zafiro
siendo de vidrio quebrado.
contestando a mi suspiro;
fuiste de duro zafiro
siendo de vidrio quebrado.
Ni un
rosal viejo y gastado
merecí de tus antojos;
sólo me diste despojos
de tu zarzal y tu roca
que me sangraron la boca
y me cegaron los ojos.
merecí de tus antojos;
sólo me diste despojos
de tu zarzal y tu roca
que me sangraron la boca
y me cegaron los ojos.
Ni una
mirada siquiera
ni una palabra sencilla,
ni siquiera la semilla
de una sonrisa ligera.
Cuando yo te daba entera
mi flor de luna y de lodo
tú... pagabas a tu modo,
y así, mientras mi hidalguía
te daba cuanto tenía,
tú me lo negabas todo.
ni una palabra sencilla,
ni siquiera la semilla
de una sonrisa ligera.
Cuando yo te daba entera
mi flor de luna y de lodo
tú... pagabas a tu modo,
y así, mientras mi hidalguía
te daba cuanto tenía,
tú me lo negabas todo.
Que ¿Qué te
di? ¡Nada...! ¡Nada!
Mi beso recién comprado
y en la fragua del costado
una hoguera desbocada.
Mi beso recién comprado
y en la fragua del costado
una hoguera desbocada.
Te di mi
huerta cercada
llena de rosas y lirios,
te di la voz y los cirios
de mis noches en desvela,
y un corazón sin cancela
roto de tantos martirios.
llena de rosas y lirios,
te di la voz y los cirios
de mis noches en desvela,
y un corazón sin cancela
roto de tantos martirios.
(Te di mi
risa y mi canto,)
(mi boca encadenada,)
(mi carne nunca estrenada)(1)
te di mi templo y mis ritos,
mi boca llena de gritos,
mis ojos llenos de llanto,
te di tanto... ¡tanto, tanto!
que darte más no podía,
y cuando ya no tenía
nada en casa que pidieras,
yo para que no dijeras
te di la casa vacía.
(mi boca encadenada,)
(mi carne nunca estrenada)(1)
te di mi templo y mis ritos,
mi boca llena de gritos,
mis ojos llenos de llanto,
te di tanto... ¡tanto, tanto!
que darte más no podía,
y cuando ya no tenía
nada en casa que pidieras,
yo para que no dijeras
te di la casa vacía.
Pero...
¿para qué te digo
cosas que no han de llegarte?
Caña frágil que se parte
no entiende de mi buen trigo,
y ya ves: ni te maldigo.
¿Para qué? Desde aquel día,
tu bajeza y mi hidalguía
se definen de este modo:
Tú me lo negaste todo,
yo te di cuanto tenía.
cosas que no han de llegarte?
Caña frágil que se parte
no entiende de mi buen trigo,
y ya ves: ni te maldigo.
¿Para qué? Desde aquel día,
tu bajeza y mi hidalguía
se definen de este modo:
Tú me lo negaste todo,
yo te di cuanto tenía.
(1)Estos versos parecen ser un añadido o “morcilla” de Marifé de Triana cantando en directo
MARIFÉ DE TRIANA,
María Felisa Martínez López nació
en Sevilla (1936-2013) Se crió en Triana. De donde toma
su apellido.
La Niña de los Peines (Pastora Pavón) dijo de
ella cuando tenía 22 años: "Marifé de Triana ha empezado por donde otros
artistas acaban díficil que alguien la iguale".
Yo creo humildemente que a día de hoy, La Niña Los Peines sigue teniendo razón
Yo creo humildemente que a día de hoy, La Niña Los Peines sigue teniendo razón
MANUEL BENÍTEZ CARRASCO
Poeta y rapsoda granaíno (1922-
1999)
Son famosas sus obras, El perro cojo, Juerga en el cielo, Como Dios manda... y ésta que nos ocupa Soleá del amor generoso.
Son famosas sus obras, El perro cojo, Juerga en el cielo, Como Dios manda... y ésta que nos ocupa Soleá del amor generoso.
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